
El gobernador de Arizona, Doug Ducey, quiere invertir 30 millones de dólares excedentes del fondo de ayuda COVID-19 para proteger el acceso del estado al suministro de agua del río Colorado.
Los esfuerzos del estado para asegurar el suministro de agua del río Colorado implican planes para negociar con las tribus originarias y otras particulares que tienen derechos de agua.
El estado quiere utilizar los 30 millones de dólares para comprar los derechos de agua. Esta cantidad se suma a los 10 millones de dólares que se solicitaron a principios de este año.
La sequía en Arizona ha creado una escasez de agua constante, y los funcionarios han tenido en cuenta este aspecto durante su proceso de planificación.
«No se trata sólo de ganar tiempo y esperar que el río se recupere. Se trata de estabilizar los niveles del lago», dijo Tom Butschatzke, director del Departamento de Recursos Hídricos.
No olvidar que desde los años 70, ya se tenía aprobado por la Agencia Internacional de Energía Atómica, el proyecto de una desaladora a orillas de Golfo de California. Es ahora la única opción viable para hacer frente a la terrible escasez por los bajos nieles del río Colorado.
Dice que los planes futuros se diseñarán para crear soluciones más permanentes. Una de las soluciones, insistió, podría ser la desalinización del agua del Mar de Cortés, pero cuestiones que van desde la política hasta la tecnología podrían interponerse en el camino. Aun así, dice, ese plan es sólo una idea para el futuro lejano.